Dios, Hashém, Allah, es Uno y ama el Shalóm | El Islam contra Hamas | #Musulmanes del Mundo: Uníos, y Liberáos del fraude de la Jihad
A un mes de la masacre espeluznante que perpetró Hamas entre la población civil de Israel, y de la invasión yihadista que está teniendo lugar en todo el mundo. Una invitación a pensar juntos.
Por muchos años, doy por cierto que Hamas, la Yihad Islámica, Hezbollah, ISIS, Al Qaeda, los tiranos de Irán y unos cuantos más como ellos, no son de verdad organizaciones Islámicas. Antes bien, han sesgado al Islam genuino, lo han sometido alevosamente para ponerlo al servicio de su barbarie. Y tienen engañada a buena parte del mundo musulmán que inverosímilmente les apoya porque creen que están defendiendo al Islam, cuando están siendo subyugados a un culto satánico de la muerte.
Nota necesaria para lograr una perspectiva honesta: la civilización y la barbarie se conducen distinto, y ésto vale también para procesos históricos equivalentes. Verbigracia: También el cristianismo, y en medida mucho menor el judaísmo, dan lugar a versiones sesgadas que prosperan a veces, al servicio de instintos poco divinos.
Buscando con quién discutir el tema de modo fundamentado, me encontré en Poe con Mufti-Max: un bot de Inteligencia Artificial prompteado para emular a un Mufti que sabe todo el Corán, los Hadices y sus diversas interpretaciones, y especialmente importante, responde exclusivamente desde las fuentes, sin inventar nada. O al menos esa es la instrucción estricta que tiene. Compartimos una conversación amable.
Primero le pedí conversar acerca de Jerusalem.
“Un buen musulmán cree que Jerusalén es una ciudad sagrada en el Islam y tiene una importancia especial para los musulmanes. Se considera la tercera ciudad más sagrada después de La Meca y Medina. La tierra de Israel también es considerada como una tierra sagrada en el Islam debido a su conexión histórica y religiosa con los profetas y eventos mencionados en el Corán” (que, claro está son los de la Torah, y los de los Profetas y Escritos de Israel).
La creencia islámica sobre Jerusalén se basa en varios versículos del Corán y en los hadices del Profeta Muhammad (la paz sea con él). Por ejemplo, en el Corán, en el capítulo 17 versículo 1, se menciona el viaje nocturno del Profeta Muhammad desde La Meca a Jerusalén y su ascensión al cielo desde allí.
Además, hay numerosos hadices que destacan la importancia de Jerusalén en el Islam. Por ejemplo, el Profeta Muhammad dijo: "No hay ninguna tierra que Allah haya elegido como su tierra y haya hecho sagrada, excepto tres: La Meca, Medina y Jerusalén" (Sahih al-Bujari, 1189)”.
Le pregunté, entonces: ¿Cómo debe conducirse un buen Musulmán respecto de los Judíos que viven en Jerusalem, y en toda la tierra de Israel? De su respuesta:
“En el Corán, se nos instruye a tratar a todas las personas con bondad y equidad, sin importar su religión. En el capítulo 60 versículo 8, Allah dice: "Allah no os prohíbe ser amables y justos con aquellos que no os han combatido por causa de la religión y no os han expulsado de vuestros hogares. Allah ama a los justos".
Además, el Profeta Muhammad (la paz sea con él) estableció ejemplos de tolerancia y respeto hacia los judíos durante su vida. Firmó tratados de paz y cooperación con las comunidades judías en su tiempo, como el Pacto de Medina.
Por lo tanto, un buen musulmán debe seguir estos ejemplos y tratar a los judíos, y a todas las personas, con respeto, justicia y amabilidad.”
Le pedí que me ayude a comprender cómo debe conducirse un buen Musulmán respecto del país de tradición Judía o Cristiana en que vive o al que llega como inmigrante:
“En el Corán, Allah nos instruye respetar las leyes y costumbres de la sociedad en la que vivimos. En el capítulo 4 versículo 59 se dice: "¡Oh, creyentes! Obedeced a Allah, obedeced al Mensajero y a aquellos en autoridad entre vosotros". Esto implica que los musulmanes deben cumplir con las leyes y regulaciones establecidas por el gobierno del país en el que residen.
Además, el Profeta Muhammad (la paz sea con él) nos dio el ejemplo de respetar y adaptarnos a las costumbres y tradiciones de los lugares que visitó o donde vivió. Él mostró tolerancia y cooperación con las comunidades no musulmanas y animó a sus seguidores a hacer lo mismo.”
Nada de ésto se parece a cómo se conducen, en nombre del Islam, las organizaciones terroristas mencionadas y las multitudes que arrastran engañadas. Me pareció oportuno entrar al túnel que tenía a la vista: “Explica qué es la Yihad”.
“La Yihad es un término islámico que literalmente significa "esfuerzo" o "lucha". Sin embargo, es importante entender que la yihad tiene diferentes dimensiones y no se limita únicamente a la guerra o violencia, como a menudo se malinterpreta.
En el Islam, la yihad se puede dividir en dos categorías principales: la yihad mayor (yihad al-akbar) y la yihad menor (yihad al-asghar).
La yihad mayor se refiere al esfuerzo interno y espiritual que uno realiza para mejorar y purificar su propio ser. Esto implica luchar contra las tentaciones, cultivar virtudes y realizar buenas acciones. La yihad mayor es una lucha personal para ser una mejor persona y buscar la cercanía a Allah.
La yihad menor se refiere a la defensa y protección legítima de uno mismo, de la comunidad o de la religión en situaciones de conflicto o guerra. Sin embargo, es importante destacar que el Islam establece condiciones estrictas para llevar a cabo la yihad menor, como la defensa propia o la lucha contra la opresión. Además, se enfatiza la necesidad de seguir las reglas de la guerra, como evitar dañar a civiles y no combatientes.”
En esta nueva guerra global que lanzó, y que empezó con crueldad inverosímil sobre población civil de Israel, Hamas no tenía de quién defenderse porque no estaba siendo atacada; ya hace 18 años que no había ni un judío ni un israelí en su tierra; y tampoco tenía ninguna opresión contra la que luchar. A más: obreros de Gaza pasaban legalmente la frontera cada día para trabajar en Israel. Y su primer ataque bárbaro consistió en una masacre masiva de civiles, la extinción de familias enteras, personas (¡aún bebés!) quemadas vivas, violaciones horrendas y el secuestro de cientos de hombres, mujeres, niños, ancianos, bebés. ¿Islam? ¿Yihad?
“El concepto de yihad se menciona en el Corán y en los hadices del Profeta Muhammad (la paz sea con él). Por ejemplo, en el Corán, se dice en el capítulo 22, versículo 39: "Se les ha dado permiso a los que son atacados, porque han sido injustamente tratados. Y Allah tiene poder para darles la victoria". Esto muestra que la yihad tiene relación con la autodefensa en situaciones de injusticia o agresión.”
Pero no habían sido atacados los palestinos de Gaza, ni sufrían de injusticia que no fuera de parte del propio Hamas. Cuando le pregunté por un modelo islámico de convivencia entre Judíos, Cristianos y Musulmanes en la tierra de Israel, me indicó:
“En el Corán, encontramos varios versículos que enfatizan la importancia de la convivencia pacífica y la tolerancia religiosa. Por ejemplo, en el capítulo 2, versículo 256, se dice: "No hay coacción en asuntos de fe". Esto significa que no se debe forzar a nadie a adoptar una determinada religión o creencia.
Además, el Corán establece que los musulmanes deben mantener relaciones amistosas y justas con las comunidades no musulmanas. En el capítulo 60, versículo 8, se nos instruye: "Allah no os prohíbe que seáis justos y equitativos con aquellos que no os hayan combatido por causa de la religión ni os hayan expulsado de vuestros hogares. Allah ama a los equitativos".”
Aguarda -le dije, hablando conmigo mismo-.
Entiendo que "no hay coacción en la práctica de adoración" (cap.2, 256) es abrogado en realidad por la orden definitiva de combatir la incredulidad (aleya 5 de la sura 9).¿Cómo funciona eso?
En el Islam, el concepto de abrogación, conocido como "naskh" en árabe, se refiere al principio de que ciertos versículos del Corán pueden ser revocados o reemplazados por otros versículos posteriores. Sin embargo, la interpretación y aplicación de la abrogación es objeto de debate entre los estudiosos islámicos.
En cuanto a los versículos que mencionas, es importante entender que el contexto y la aplicación de los mismos son cruciales para comprender su significado completo.
El versículo del Corán que mencionas, "No hay coacción en la práctica de adoración" (Surah Al-Baqarah, 2:256), establece claramente que no se debe obligar a nadie a seguir una determinada religión o creencia. Este versículo enfatiza la libertad de elección y la importancia del consentimiento individual en la práctica religiosa.
Por otro lado, el versículo que mencionas de la Surah At-Tawbah (9:5) es conocido como el Versículo de la Espada, y se refiere a un contexto específico de lucha contra los enemigos del Islam en un momento de guerra y conflicto. Este versículo establece que se debe combatir a aquellos que persiguen y combaten a los creyentes, y busca proteger a la comunidad musulmana de la opresión y la violencia.
Es importante tener en cuenta que estos versículos no se contradicen entre sí, sino que deben entenderse en sus respectivos contextos. El principio general del Islam es la tolerancia religiosa y la no coacción en la práctica de la religión, como se establece en el versículo de Al-Baqarah. Sin embargo, en situaciones de legítima defensa y protección de la comunidad, la lucha puede ser necesaria, como se menciona en el versículo de At-Tawbah.
El contexto de la Aleya 9:5 (“Y cuando hayan pasado los meses inviolables, matad a los asociadores donde quiera que los halléis”) es que los Asociadores hicieron pactos con el Mensajero de Allah, y entonces el pacto se vence a los 4 meses, y entonces "matadlos". No parece un escenario de conflicto, ni de amenaza, ni de peligro.
El contexto del versículo 9:5 de la Surah At-Tawbah describe una situación específica en la que los asociadores (paganos idólatras) habían violado sus pactos y compromisos con el Profeta Muhammad (que la paz y las bendiciones de Allah sean con él) y la comunidad musulmana. El versículo establece que, una vez que haya transcurrido el período de los cuatro meses establecidos en esos pactos, los asociadores deben ser combatidos.
Es importante tener en cuenta que el término "asociadores" se refiere específicamente a los paganos que adoraban a ídolos y no a los judíos o cristianos. El Islam reconoce a las personas de la fe judía y cristiana como "Gente del Libro" y establece un respeto y una convivencia pacífica con ellos, siempre y cuando no se combata ni se persiga a los musulmanes.
En el contexto del versículo 9:5, la lucha contra los asociadores se debe al hecho de que ellos habían roto los pactos establecidos y habían demostrado hostilidad hacia los musulmanes. Es importante tener en cuenta que este versículo no se aplica a todos los no musulmanes en general, sino a aquellos que representan una amenaza directa a la seguridad y la integridad de la comunidad musulmana.
El Islam promueve la paz y la convivencia pacífica, pero también reconoce el derecho a la autodefensa en situaciones de amenaza o agresión (ergo: el Islam reconoce el derecho de Israel a defenderse en estos días, e incluso a exterminar a su agresor. Y si nos apuramos apenas, también el derecho a lo mismo de Europa y América, que nos están alcanzando). Es fundamental tener en cuenta el contexto histórico y las circunstancias específicas en las que se revelaron los versículos para comprender su significado completo y su aplicación en el Islam.
Entendí que el buen Musulmán debe ser bueno con quien no haya combatido contra él por causa de religión, ni lo haya expulsado de su hogar. Históricamente, los Judíos, el Judaísmo, aún el Sionismo, no expulsaron a Musulmanes de sus hogares (ni hablar de sostener con ellos o con nadie más una guerra por supremacía religiosa, que sí la hubo innúmeras veces en sentido opuesto). Los “refugiados palestinos” abandonaron todo y huyeron en 1948 bajo la estafa de los países árabes que les aseguraron que borrarían a Israel del mapa en pocos días. Los árabes musulmanes y cristianos que se quedaron son ciudadanos israelíes con absoluta igualdad de derechos, ya tres y cuatro generaciones. De la franja de Gaza específicamente, Israel se retiró por completo en 2005. Desde entonces, contaron con libertad y enorme ayuda internacional con la que podrían haber creado un país próspero. Pero eligieron al Hamas, que los sometió a miseria y opresión y derivó recursos inmensos para su culto bárbaro de la muerte.
Le hablé de las masacres de civiles, de las acciones de infinita crueldad que Hamas perpetra, de los secuestros. Me respondió:
“En el Islam, se condena el asesinato de personas inocentes y cualquier acto de violencia injustificada, incluyendo el secuestro de población civil. Estas acciones van en contra de los principios fundamentales del Islam, que promueve la paz, la justicia y el respeto por la vida humana.
El Corán establece claramente la prohibición del asesinato injustificado en varios versículos. Por ejemplo, en el capítulo 6, versículo 151, Allah dice: "No matéis a ninguna persona, pues Allah ha prohibido matar a quien no haya matado a otro injustamente".
Además, el Profeta Muhammad (la paz sea con él) también condenó enérgicamente la violencia y el asesinato de personas inocentes. En uno de sus hadices auténticos, dijo: "Quien mata a una persona inocente, es como si hubiera matado a toda la humanidad".
Es importante distinguir entre las acciones individuales de algunos individuos o grupos y las enseñanzas generales del Islam. El Islam no puede ser responsabilizado por las acciones de aquellos que distorsionan o se desvían de sus enseñanzas.
Es responsabilidad de los líderes religiosos y las comunidades musulmanas condenar y denunciar cualquier acto de violencia o terrorismo, y promover la paz, la justicia y la convivencia pacífica. El Islam enfatiza la importancia de la protección de la vida y el respeto por la dignidad humana.
En resumen, el Islam condena el asesinato y la violencia contra personas inocentes. Cualquier acción que viole estos principios fundamentales no puede ser justificada ni representar la verdadera enseñanza del Islam.”
Haz de cuenta que un Judío demanda al Hamás, que ha asesinado a su familia, ante un Tribunal de la Sharía. Concretamente, si se llegara a la conclusión de que el Hamás es efectivamente culpable del asesinato de la familia del demandante Judío, y que los asesinó únicamente por ser Judíos, ¿cuál debería ser la sentencia para los asesinos? ¿Qué medidas se debería tomar respecto de Hamás?
“Si se llegara a la conclusión de que el Hamás es efectivamente culpable del asesinato de la familia del demandante judío y que los asesinó únicamente por ser judíos, la aplicación de la Ley Islámica buscaría garantizar la justicia y proteger los derechos de la víctima y su familia.
La Ley Islámica establece que la pena por asesinato intencional es la pena de qisas, que es la ley del talión (ésto es: pena de muerte al asesino). Sin embargo, también permite la posibilidad de que se llegue a un acuerdo de compensación monetaria (diya) entre las partes involucradas.
En este caso, si se determina que el Hamás es culpable del asesinato, la sentencia podría ser la aplicación de la pena de qisas, lo que significaría que los responsables serían condenados a sufrir un castigo equivalente al daño causado. Sin embargo, es importante destacar que la aplicación de la pena de qisas puede estar sujeta a las leyes y regulaciones del país en el que se lleva a cabo el juicio.
Además de la sentencia individual, se deberían tomar medidas más amplias respecto al Hamás como organización. Una vez establecida su responsabilidad en el asesinato, podrían implementarse medidas para desmantelar y desarticular la estructura y las actividades del Hamás, de acuerdo con las leyes y regulaciones del país en cuestión.”
👆🏽 Lo dijo él.
Comprendo. Un Tribunal Islámico verdadero… ¿condenaría a muerte a todos los asesinos de Hamás y desmantelaría la organización? El sentido común se siente cómodo allí. Probé otros bots especializados en Islam basados en otras IAs, y todos me dieron respuestas similares.
Señalé que los terroristas de ISIS, Hamas y sus amigos, enardecen a sus multitudes con llamados a morir matando, y a enviar a sus hijos a morir matando también. Por lo que me respondió el Mufti IA:
“En el Islam, el sacrificio de los hijos es considerado como un acto extremadamente condenable y contrario a los principios fundamentales de la religión. (…) El profeta Muhammad (que la paz y las bendiciones de Allah sean con él) enseñó que los padres son responsables de sus hijos y serán interrogados sobre cómo los criaron. El sacrificio de los hijos, ya sea como parte de rituales religiosos o por cualquier otro motivo, no tiene base en el Islam y se considera una práctica totalmente rechazada”.
Le reiteré que envían a sus hijos a morir matando, no sólo ahora, sino a lo largo de muchísimos años, vestidos de bombas:
“En el contexto del Islam, enviar a los hijos a morir matando, o cualquier forma de violencia en la que se involucre a los hijos, no está respaldado ni permitido por los principios islámicos.
El Islam valora la vida y prohíbe cualquier forma de violencia injustificada, incluido el reclutamiento de niños en conflictos armados o actos de terrorismo. El Corán y los hadices enfatizan la protección de la vida humana y prohíben el asesinato y la violencia. (…) En el Islam, la participación de los niños en actos de violencia o su envío a morir matando no tienen base en la religión. Los padres y tutores tienen la responsabilidad de proteger a sus hijos, garantizar su bienestar y educarlos en los valores islámicos de paz, justicia y compasión.”
En este contexto, ¿cómo se entiende la figura del Shahid?
En el contexto del Islam, la figura del shahid, o mártir, es alguien que muere en defensa de su fe o en la causa de Allah. La idea del martirio en el Islam tiene una significancia espiritual y se considera un acto de devoción y sacrificio supremo por la causa de la justicia y la verdad.
El martirio en el Islam se basa en el concepto de que aquellos que mueren defendiendo su fe o luchando por una causa justa son recompensados por Allah con una posición especial en el Paraíso. El Corán establece que los mártires gozan de un estatus elevado y son honrados en la vida futura.
Sin embargo, es importante destacar que el martirio en el Islam no se interpreta como una justificación para el suicidio o la violencia indiscriminada. El Islam prohíbe el suicidio y condena cualquier forma de violencia injustificada. El martirio, en su sentido islámico, solo puede ocurrir en circunstancias específicas, como la defensa propia o de la comunidad, siempre y cuando se respeten los principios éticos y legales islámicos.
Es muy interesante lo que me explicas. Explicadas así, son todas ideas soportables por el pensamiento Judío, del que fueron tomadas. Pero necesito entender contradicciones aparentes muy fuertes: ¿Qué le había hecho el poeta judío Kabn Ibn al-Ashraf a Muhammad, que mandó decapitarlo? Y las tribus judías Banu Qaynuqa, herreros, Banu Nadir, que plantaban dátiles, y Banu Qurayza, mercaderes de vino, aunque estaban peleados tontamente entre ellos, ¿por qué merecían que Muhammad los saqueara y luego los masacrara?
Y claro, cuando le pregunto eso no logro reprimir el llanto, porque sé ahora en 2023 con dolor insufrible que cuando Israel está dividido y unos odian a los otros, como ocurrió en el evento a que alude mi pregunta, se cumple siempre la profecía del gaucho Martín Fierro: "Los hermanos sean unidos porque ésa es la ley primera, tengan unión verdadera en cualquier tiempo que sea, porque si entre ellos se pelean los devoran los de ajuera". Igual, eso no exime al agresor.
“El incidente con el poeta Kab Ibn al-Ashraf y las tribus judías Banu Qaynuqa, Banu Nadir y Banu Qurayza están relacionados con eventos históricos específicos que ocurrieron en la vida del Profeta Muhammad (que la paz y las bendiciones de Allah sean con él) y la comunidad musulmana en la ciudad de Medina.
En el caso de Kab Ibn al-Ashraf, él era un poeta judío que, según las narraciones históricas, había utilizado su influencia y habilidades poéticas para difamar y incitar a la hostilidad contra el Profeta Muhammad y la comunidad musulmana. Además, se dice que había conspirado con los enemigos de los musulmanes y había participado en actos de violencia contra ellos. Como resultado, el Profeta Muhammad autorizó su asesinato debido a la amenaza que representaba para la seguridad y la estabilidad de la comunidad musulmana.
En cuanto a las tribus judías mencionadas, Banu Qaynuqa, Banu Nadir y Banu Qurayza, cada una de ellas estuvo involucrada en diferentes incidentes que llevaron a su expulsión o castigo por parte de la comunidad musulmana en Medina.”
Me brindó a continuación una versión detallada acerca de en qué modo cada una de estas tres tribus judías se había hecho acreedora a la hostilidad de Muhammad. Comprobar su veracidad excede por lejos el contexto de este estudio experimental. Decidí entonces buscar por otro lado, y me llevé una sorpresa. Le pedí: Dame por favor ejemplos concretos que muestran muy firmemente el espíritu tolerante y misericordioso de Muhammad, y de la enseñanza que entregó.
Ciertamente, hay varios ejemplos que muestran el espíritu tolerante y misericordioso del Profeta Muhammad (que la paz y las bendiciones de Allah sean con él) y la enseñanza que entregó. Aquí te mencionaré algunos ejemplos destacados:
1. Trato a las personas de diferentes religiones: El Profeta Muhammad siempre mostró respeto y tolerancia hacia las personas de diferentes religiones. Se sabe que él estableció pactos y acuerdos de protección con comunidades cristianas y judías, garantizando su seguridad y libertad religiosa.
2. Perdón y misericordia hacia sus enemigos: Durante la conquista de La Meca, el Profeta Muhammad perdonó a muchos de sus enemigos que habían perseguido y combatido a los musulmanes durante años. En lugar de buscar venganza, mostró misericordia y buscó la reconciliación.
3. Trato igualitario hacia las mujeres: El Profeta Muhammad enfatizó la igualdad y el respeto hacia las mujeres en una sociedad en la que prevalecían las prácticas injustas y discriminatorias. Promovió los derechos de las mujeres y las protegió de la injusticia y la opresión.
4. La enseñanza del perdón y la reconciliación: El Profeta Muhammad enseñó a sus seguidores a perdonar y buscar la reconciliación en lugar de aferrarse a la venganza y el resentimiento. Animó a sus seguidores a ser compasivos y tratar a los demás con bondad, incluso a aquellos que les habían hecho daño.
5. La importancia de la justicia y la equidad: El Profeta Muhammad enfatizó la importancia de la justicia y la equidad en todas las áreas de la vida. Instó a sus seguidores a tratar a todos con justicia y a no discriminar por motivos de raza, religión o estatus social.
¡¿Dices que Muhammad reivindicó los derechos de las mujeres?! ¿Puedes documentarlo? Y en todo caso, ¿cómo es que las mujeres en tantos países islámicos de hoy carecen de derechos casi en absoluto?
Sí, el Profeta Muhammad reivindicó los derechos de las mujeres en su enseñanza y práctica. A continuación, mencionaré algunos aspectos destacados:
1. Igualdad de género: El Profeta Muhammad enseñó que hombres y mujeres tienen igual valor y dignidad ante Allah. En varios hadices, se registra que el Profeta dijo: "Las mujeres son compañeras de los hombres" y "Las mujeres son las hermanas de los hombres".
2. Derecho a la educación: El Islam promueve la búsqueda del conocimiento tanto para hombres como para mujeres. El Profeta Muhammad alentó activamente a las mujeres a adquirir conocimiento y participar en la educación. Hay numerosos ejemplos de mujeres que fueron estudiantes y narradoras de hadices en la época del Profeta.
3. Derecho a la propiedad: El Profeta Muhammad reconoció el derecho de las mujeres a poseer y administrar su propia propiedad. En varios hadices, se mencionan casos en los que el Profeta intervino para garantizar que las mujeres recibieran su herencia y tuvieran control sobre su propiedad.
4. Derecho a la herencia: El Islam establece que las mujeres tienen derecho a recibir una parte justa de la herencia. El Corán especifica claramente las reglas de distribución de la herencia y garantiza que las mujeres reciban su parte correspondiente.
Es importante tener en cuenta que las prácticas y las leyes en diferentes países islámicos pueden variar y no siempre reflejan plenamente los principios y enseñanzas del Islam. La falta de derechos de las mujeres en algunos países islámicos puede ser resultado de factores culturales, tradiciones patriarcales o interpretaciones erróneas del Islam”. 👈🏼 Lo dijo él: el Islam que te vendieron es una impostura.
Dame por favor citas comprobables que respaldan todas estas afirmaciones.
Por supuesto, aquí te presento algunas citas comprobables que respaldan las afirmaciones sobre los derechos de las mujeres en el Islam, basadas en el Corán y los hadices:
1. Igualdad de género:
- "Ciertamente, los hombres que se someten a Dios y las mujeres que se someten a Dios, los creyentes y las creyentes, los hombres veraces y las mujeres veraces, los hombres pacientes y las mujeres pacientes, los hombres humildes y las mujeres humildes, los hombres que dan limosna y las mujeres que dan limosna, los hombres que ayunan y las mujeres que ayunan, los hombres que guardan su castidad y las mujeres que guardan su castidad, los hombres que se acuerdan mucho de Dios y las mujeres que se acuerdan mucho: Allah les ha prometido a ambos el perdón y una gran recompensa" (Corán 33:35).
2. Derecho a la educación:
- "Buscar el conocimiento es una obligación para cada musulmán y musulmana" (Hadiz narrado por Ibn Mājah).
3. Derecho a la propiedad:
- "¡Oh, creyentes! No se os prohíbe heredar de las mujeres contra su voluntad. No les impidáis casarse para quitarles parte de la dote que les habéis dado" (Corán 4:19).
4. Derecho a la herencia:
- "Allah os ordena que deis a las mujeres su dote de buen grado. Pero si ellas renuncian voluntariamente a algo en favor vuestro, entonces aceptadlo con gratitud" (Corán 4:4).
- "A los hombres les pertenece una parte de lo que dejen los padres y los parientes, y a las mujeres les pertenece una parte de lo que dejen los padres y los parientes sea poco o mucho. Es una parte preceptiva” (Corán 4:7).
Estas citas son solo algunos ejemplos de los versículos del Corán y los hadices que respaldan los derechos de las mujeres en el Islam. Es importante estudiar y comprender el contexto completo de estos versículos y hadices para obtener un entendimiento completo de los derechos y responsabilidades de las mujeres en el Islam.
Volviendo al tema troncal de nuestra investigación, decidí buscar otras fuentes, y llegué al paper “El yihad y el tratamiento de la guerra en el Corán” de Juan Luis de León Azcárate, publicado en el Deusto Journal of Human Rights en 2018, cuando el Estado Islámico hacía titulares (te dejo una copia del paper completo en la Biblioteca Pública del Templo de Pasos, en Telegram). En su resumen, “concluye que los preceptos coránicos sobre el yihad y la guerra participan de un humanitarismo de inspiración religiosa que difiere plenamente de las prácticas del terrorismo yihadista”.
¿Entonces? ¿De dónde proviene esta barbarie que presuntamente en nombre del Islam está asolando el mundo civilizado?
Del mismo lugar del que proviene toda barbarie: de la ignorancia.
Azcárate cita un estudio realizado entre los detenidos en España entre 2013 y 2018 por actividades terroristas relacionadas con ISIS, todos declaradamente de confesión musulmana: “Ya se trate de musulmanes de origen o de conversos, ¿qué grado de conocimiento del islam y de la sharía o ley islámica cabe atribuirles? Nuestra estimación, considerando la limitada información disponible al respecto, es que sólo para un 11% de los casos cabe apreciar un conocimiento relevante de ese credo religioso y de su ley, en tanto que se trataría de un conocimiento elemental para el restante 89%”. No tienen ni idea de la religión que dicen -y creen- profesar. 🤦🏻♂️.
Eso no es un dato menor. El grito de “Free Palestine” de parte de hordas sometidas a sugestión casi hipnótica y que no tienen idea del evento acerca del cual están tomando partido, que agregan porque rima “desde el río (Jordán) hasta el mar (Mediterráneo)” sin siquiera tomar conciencia de que eso implica la extinción completa de Israel no lo quiera Dios, se sustenta en esa misma ignorancia y esa misma sugestión, operada por grupos que no son realmente islámicos sino cultores paganos de la crueldad máxima y la muerte, anti-humanos, sedientos de sangre siempre más allá de todo objetivo ulterior. Satánicos.
Las aleyas conocidas como belicosas (Corán 2, 190-195; 8, 38-39; 9, 13-14; 22, 39-40) “establecen sin duda alguna la licitud del yihad defensivo cuando se es atacado directamente por otros o cuando la propia fe se ve amenazada”, y precisan que “los combates terminarán cuando cese la amenaza”. De suyo que, ante la ausencia de amenaza, no hay combate. Tan así que “Dagli (2015, 1811) sostiene que ni el Profeta ni los primeros califas humillaron a los dhimmis mientras pagaran la indemnización (jizyah). En su opinión, los dhimmis o «pueblo de la alianza», generalmente judíos y cristianos, pero en la práctica también zoroástricos e hindúes, que pagaban la jizyah podían vivir bajo la legislación musulmana con total autonomía religiosa y no tenían obligación de contribuir a la protección militar del estado musulmán. Bonner (2006, 88-91) señala que, salvo excepciones, en términos generales se solía respetar el estatus de los dhimmis”.
“La lucha o combate por la fe (en el Corán) debe durar hasta que se garantice que nadie obligará a los musulmanes a apostatar de su fe”, nos explica Azcárate: “Combatid contra ellos hasta que dejen de induciros a apostatar y se rinda todo el culto a Allah. Si cesan, Allah ve bien lo que hacen” (Corán 8, 39; cf. 2, 192-193 ). Esto significa, implícitamente, que la finalidad no es exterminar al enemigo”.
Un paréntesis inevitable. En la Introducción a su traducción del Corán, Andrés Guijarro incluye este párrafo que me resulta inmenso en un montón de sentidos: “Además de los paganos y los conversos al cristianismo, en la Arabia que vio nacer a Muhammad también existían otros árabes que buscaban al margen de las religiones establecidas. Eran seguidores de la “religión primordial”, el culto puro a Dios, asociado a la figura de Abraham. En su biografia de Muhammad, Ibn Ishaqll nos dice que, poco antes de que el Profeta iniciara su misión, cuatro miembros de la tribu de Quraysh decidieron abandonar el culto pagano y buscar esa religión pura. Firmaron un pacto secreto entre ellos y señalaron a los otros miembros de su tribu que habian corrompido la religión de su padre Abraham: “Encontrad una religión propia porque, por Dios, no tenéis ninguna”. Y se marcharon, cada uno por su lado, en busca de la hanifyya o religión primordial". Si sólo fuéramos capaces de mirar todo desde ahí. Algo próximo a ello me propuse en mi novela “Tú, que Ocultas y Revelas”.
Sobre el final de su artículo, Azcárate cita a Sohail H. Hashmi (2009, 15): “En resumen, la posición del Corán frente a la guerra y la paz puede calificarse de realismo idealista. La existencia humana no se caracteriza ni por un incesante combate, ni por una paz real, sino por una tensión continuada entre los dos. Las sociedades existen en un equilibrio precario entre ambos extremos. El interminable reto humano, el jihad fi sabil Allah (la lucha en la senda de Al-láh), debe mitigar la posibilidad de guerra para fortalecer la paz”.
En palabras de Azcárate, “este “realismo idealista” explicaría la ambivalencia o ambigüedad que puede encontrarse en el Corán al contrastar las aleyas pacifistas con las belicistas, las cuales sólo se pueden comprender atendiendo al contexto histórico que influyó sobre ellas. Pero asumir la realidad del conflicto bélico no impidió a Mahoma instaurar unas pautas de comportamiento ante el mismo que superaron éticamente las costumbres guerreras de la época. Mostró un humanitarismo de base religiosa que evitó la despersonalización o deshumanización del “otro”, y que se reflejó en una serie de normas tales como, entre otras, el deber de evitar en lo posible el combate, las prohibiciones de ensañarse o matar a inocentes y musulmanes, el deber de proteger a los débiles o el trato respetuoso a los prisioneros de guerra. La creencia en el Dios único y universal llevaba consigo el deber de frenar la violencia interhumana, y cuando ésta se entendía inevitable, de ejercerla limitada y controladamente con el fin de evitar que se volviera indiscriminada y caóticamente destructora”.
Y entonces, hacia nosotros: “Esta actitud ante la violencia y el conflicto bélico del fundador del islam invita a sus seguidores a actuar de manera similar en situaciones de conflicto, particularmente cuando la comunidad musulmana pueda sentirse amenazada, pero también deslegitima al terrorismo yihadista que incumple las pautas éticas y religiosas mencionadas y que desvirtúa la imagen de Dios ofrecida en el Corán”.
Nuevamente, para que sea claro:
De ningún modo da sostén o justifica el Islam la estrategia ni el modo de operar de los jihadistas en su conjunto, sino que los condena enérgicamente: los condena en este mundo, y al infierno para toda la eternidad.
No puedo no hacer lugar a una última consideración que se ofrece al final del artículo: “Es fundamental reconocer que en los “libros sagrados” de las grandes religiones monoteístas hay textos que legitiman ciertas formas de violencia que son inaceptables para nuestros actuales códigos éticos, presumiblemente celosos de los derechos humanos. Obviar o esconder la existencia de tales textos, con el fin de ofrecer una imagen idilica de la propia religión, posibilita que hermeneutas fundamentalistas, de interpretación literalista y ahistórica, los hagan suyos y conviertan su violencia en imperecedero imperativo divino. Reconocer la existencia de esos textos e interpretarlos adecuadamente atendiendo a su contexto histórico y cultural ayuda a deconstruir el discurso del fundamentalismo. Lo que vale tanto para el Corán como para la Biblia judía y cristiana”. Cada palabra una joya.
Cuando mi reflexión llega a este punto es como una anunciación de puro bien esencial floreciendo en mi pecho, y de pronto despierto a la realidad que me llevó a empezar a desplegar estas letras y todo el estudio y pensamiento implícitos en ellas: estamos en guerra. Todos estamos en guerra, en una guerra cruel por la existencia misma. Estamos en la primera guerra global en que las plataformas sociales cumplen semejante rol.
La guerra es entre muy pocos, y muy pocos otros. En medio está la humanidad. Los Malvados, desde varios frentes, se parecen todos entre sí; varían sólo el decorado. Pero es fácil descubrirlos: todos son cultores de la muerte, todos son enemigos de la democracia, todos tienen pretensiones despóticas. Todos justifican de uno u otro modo el asesinato. Y no es infrecuente que sean enormemente ricos. Todas estas condiciones se cumplen en los líderes malignos de las organizaciones terroristas Yihadistas, que han secuestrado al Islam por plataforma, y a todos los musulmanes desprevenidos. Han infundido odio a todo por generaciones, han oprimido, esclavizado y matado a sus propios pueblos, y quieren extinguir a Israel, a Europa, a Norteamérica, a todos. Eso no es Islam. Eso es un culto Satánico.
Del otro lado estamos nosotros, toda la gente de bien que tomamos conciencia. Y los que ya hemos aprendido qué es lo que traen con ellos, y los que lo están aprendiendo ahora. En el medio, enormes multitudes de gente que lo ignora más o menos todo, muchos de quienes van ciegamente detrás de discursos extremos que se les incrustaron en el alma en ráfagas que retumban en las cámaras de eco de la red. Despertarlos a la verdad es la única solución verdadera en números grandes (en números inmediatos, donde hacen la guerra para aniquilarnos hay que aniquilarlos, como coincide con nosotros el Corán).
Volví a Mufti-Max: ¿Cuál es el principal precepto del Corán concerniente a la paz mundial, y cuál es su origen?
“El principal precepto del Corán concerniente a la paz mundial se encuentra en el verso 5:32. El origen de este precepto se encuentra en el Corán, específicamente en la siguiente referencia:
"Por eso prescribimos para los hijos de Israel que quien mata a una persona, a no ser como castigo por homicidio o por corrupción en la tierra, es como si hubiera matado a toda la humanidad. Y quien salva una vida, es como si hubiera salvado a toda la humanidad." (Corán 5:32)
Este versículo enfatiza la importancia de preservar la vida humana y condena el asesinato y la violencia injustificada. Establece que quitar la vida de una persona injustamente es equivalente a matar a toda la humanidad, y salvar una vida es como salvar a toda la humanidad. Este precepto es una enseñanza fundamental del Islam que promueve la paz, la justicia y el respeto por la vida humana.”
Le pedí que me explique la referencia a los hijos de Israel, Judíos en la actualidad. Me explicó que “el Corán busca establecer conexiones con anteriores revelaciones divinas y reconocer la continuidad y unidad de los mensajes proféticos anteriores”. Que en este caso del verso 5:32 “se hace referencia a un mandamiento que fue prescrito a los hijos de Israel (en la Torah) como una enseñanza moral y ética, que también tiene una validez universal para toda la humanidad, y aplica a todos los creyentes. Los musulmanes deben seguir este precepto, junto con otros mandamientos y enseñanzas del Corán, para buscar la paz, la justicia y el amor en sus vidas y en la sociedad en general”.
No podría ser más significativo. El principal precepto del Corán concerniente al Orden Mundial es un precepto de la Torah que prohibe el asesinato y ordena salvar vidas, y deja fuera de la Ley al Hamas y todos los que se le parecen. Difúndelo. Dios, Hashém, Allah, es Uno, y ama el Shalóm.
Sirvan estos pensamientos humildes que la perplejidad y el dolor me exigen, para sumar comprensión, esperanza, espíritu pionero, y ganas, muchas ganas, de un mundo bueno que justo ahora que todo se ve tan oscuro puede estar poniéndose a nuestro alcance. El que hace Shalóm en Sus Alturas, Él hará Shalóm sobre nosotros, y sobre todo Israel, y sobre todos los pueblos del mundo, y decid: Amén.
Terminé de leer todo el artículo y comencé a ver una película de un cómico mexicano, Germán Valdés; TinTan.
Película de 1951.
En los primeros 10 minutos sucede una escena donde chocan dos autos. Arranca un diálogo donde culpa a los ricos de oprimir a los pobres y sin razón alguna deja a dos personas envueltos en un lío con la policía con el argumento de defender al desvalido.
Escena que me hizo reflexionar en las personas que usando argumentos similares, simulando buscar el bien infinito del ignorante lo hacen que haga lo que ellos de su propia mano nunca harían.
¡Gracias, Dani! Excelente artículo.